martes, 25 de septiembre de 2012

No me dejes caer.


No me dejes caer ahora que volamos tan alto. Contigo dejé el pasado atrás y puse la mirada al frente, contigo perdí el miedo a intentar. Me hiciste ver el mundo de otra manera, descubrir cosas que no sabía. Me levantaste y me ayudaste a volar, y llegamos tan alto, ¡tan alto! Sé que el cielo se extiende más y más arriba, y que aún nos espera mucho por recorrer, pero ya no tengo miedo. Sólo te pido que te aferres a mi mano con la misma fuerza que yo a la tuya y que no me sueltes, no me dejes caer.

domingo, 12 de agosto de 2012

Dime porqué


Las lágrimas no se detenían en mi rostro y las palabras de trababan en mi garganta, añadiendo presión al nudo que ya se había formado. Eran lágrimas silenciosas, el orgullo era mayor y no me permitía darles más vida, pero ardían como si fueran vinagre y quemaban como fuego.

La rabia se disipó rápidamente dejando lugar a la tristeza, una amarga tristeza que pesaba demasiado. Para mi fortuna la radio me entendía y pasó en una canción todo aquello que no pasaba de mi garganta.

“Dices que me quieres pero luego me dejas a un lado… Siento que no te conozco...”

El llanto aumentó con la canción, pero una vez que ésta acabó, me sentía libre, renovada.

“Doy un paso atrás y te dejo ir. Te dije que no era a prueba de balas, ahora lo sabes…”


martes, 15 de mayo de 2012

Amor




Sonríe y detén el tiempo,
sonríe y detén mi mundo,
que los minutos se apresuran en el reloj
y la luna se asoma en el cielo.
No puedo despedirme ahora, no todavía
¡queda tanto por decir!
Y sobran demaciadas palabras...

Mírame y no me dejes ir,
que a veces huir me resulta tan fácil.
Abrázame y no me dejes,
que lo que quiero es luchar por esto hasta el final...

Ya no siento miedo, lo perdí en tus ojos,
ya no tengo dudas, las mataron tus besos...
Así que toma mi mano y llevame lejos,
donde el tiempo no corra y no deba dejarte... 

domingo, 8 de abril de 2012

El Caballero y su Reina.

Con su espíritu de Caballero va salvando princesas que se sienten perdidas, va sembrando sonrisas, va dejando recuerdos... Es un caballero que olvida a su reina; es mayor su "caballerosidad" que su "amor"... Por cada princesa que salva, es una noche en que llora su reina...
Con su libertad tan encerrada, la Reina roba suspiros... la ven libre e independiente, pero no saben de sus noches oscuras... Atada a la espera de su caballero, no ve a los príncipes que rodean, y si los ve, los aleja...

¿Sabrá el Caballero del llanto de la Reina?

jueves, 2 de febrero de 2012

Días

Hay días en los que todo parece salir bien, y lo que no, simplemente no importa. Esos días en los que todo nos hace sonreír, nos sentimos en armonía con el universo y nada puede ir mal. Sentimos que cada respiración que tomamos o cada paso que damos, son correctos; sentimos que estamos en el lugar que debemos estar, todo es como debe ser...



Y luego están esos otros días, días en los que nada está bien, y lo que no nos hace llorar, nos perturba. Todo parece desordenado e incorrecto. Sentimos un aturdimiento constante que nos provoca gritar y romper todo, pero con suerte si lloramos. Queremos correr y dejar atrás todo, pero más atrapados nos sentimos...

Cómo



¿Cómo se supone que pase algo entre nosotros si sigo negando lo que siento? Esto no puede seguir así, te pienso todo el día, pero luego me miento o lo ignoro. Te quiero, y quiero que estemos juntos, pero no puedo evitar la sensación de que no sería correcto. Una señal, un mensaje, sólo te pido una clara señal de que querés lo mismo y que lo demás no te importa; con eso asegurado, ya no tendría miedos.

sábado, 31 de diciembre de 2011

FIN DE AÑO!

Una hoja de papel ardía mientras todos a su alrededor veían el espectáculo que los fuegos artificiales mostraban en el cielo. Diez deseos escritos en la hoja por una persona llena de esperanzas, ardían mientras todos a su alrededor sonreían. Ella tenía fe en el mañana, en el futuro...no sabía cuántos "mañana" le quedaban en su vida pero pensaba disfrutar de cada hoy que tuviera.

Se quedó observando la hoja hasta que sólo quedaron cenizas.

               - ¿Qué pediste?-le preguntaron.
               - Un nuevo comienzo- se limitó a responder.

Ella sabía el significado detrás de sus propias palabras, pero sería incapaz de admitirlo en voz alta.

En otra parte de la cuidad, alguien deseaba lo mismo...

FELIZ AÑO NUEVO!